domingo, 28 de abril de 2013

The Vampire Diaries 4x20 The Originals

ENTRADA CON SPOILERS

Llevábamos mucho tiempo esperando este capítulo de The Vampire Diaries que ha servido como piloto de su spin-off, The Originals, nombre que ha dado título al episodio. Pues sí, llevábamos mucho tiempo esperando por él, tardó, pero como se dice, lo bueno se hace esperar. Posiblemente ha sido el capítulo de The Vampire Diaries que más me ha gustado de toda la temporada (y no veo la hora de que llegue octubre para poder ver la temporada completa). Y es que no es un secreto para nadie que The Vampire Diaries está, bajo mi punto de vista, flaqueando. Que toda la historia se centre en Elena y la cura es aburrido, la verdad, a pesar de la historia de Klaus y Caroline, y de Rebekah y del maravilloso Damon Salvatore. Es por eso que creo que este episodio de The Vampire Diaries ha sido de una frescura increíble, capaz de devolvernos la ilusión con nuestros ojos puestos en el próximo otoño. Porque reconozcámoslo, Klaus es, hoy por hoy, el personaje más interesante de The Vampire Diaries, y las tramas a su alrededor son las mejores. No es que hayamos dejado de soñar con Damon, pero Klaus está escalando posiciones a pasos agigantados. 

La búsqueda de una bruja conduce a Klaus hasta Nueva Orleans, ciudad que una vez fue su hogar. Allí al tratar de localizarla, descubre que Marcel, su antiguo protegido, tiene el poder sobre la ciudad y sobre las brujas. Tanto así, que a la que está buscando en asesinada sin piedad ante los ojos de muchos vampiros. Marcel ha construido un imperio en Nueva Orleans y no está dispuesto a renunciar a él, ni si quiera por Klaus. Quien no se acoja a su ley, morirá. Pero, ¿qué pasa cuando el más rebelde del lugar es inmortal?

Junto a las brujas crean una estrategia para derrotar al malvado Marcel, que pasará por la infiltración del Original en su banda. Klaus quiere lo que tiene Marcel: lealtad, familia, respeto. Y lo va a conseguir: quiere ser el Rey de la ciudad. Y con la ayuda de sus hermanos, posiblemente lo consiga, aunque Rebekah aún es reacia a abandonar Mystic Falls por su familia a la que considera que nada le debe. 

Pero quizá lo que nos dejó impactados realmente con el capítulo fue la historia de Hayley. ¿Recuerdan el affaire que tuvo con nuestro querido Niklaus? Pues de ese rollo ha nacido un fruto. Hayley está embarazada. ¿Cómo es posible si los vampiros no pueden reproducirse de esa manera? Debido a la parte hombre-lobo de Klaus. Pero entonces, ¿de qué clase de monstruo está embarazada Hayley? Pronto lo descubriremos, supongo. Pero Klaus quiere ser el Rey, y ese bebé será su heredero. 

La parte más tierna del episodio, sin duda alguna, cuando llama a Caroline para decirle en el lugar maravilloso en el que se encuentra, lugar que le encantaría enseñarle alguna vez. ¿Habrá visita de la rubia a Nueva Orleans? Ojalá. 


Sólo quedan tres episodios para que termine la cuarta temporada de The Vampire Diaries, y el próximo, que llevará por título She's Coming Undone, se emitirá el próximo jueves en Estados Unidos. A continuación les mostramos el tráiler:


XoXo, Mystic Falls

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